Miembros de la Delegación Dominicana 2005, desde la izquierda, Stalyn Hernandez, Kyamalie Sang, Rabeika Messina, Paola Molina, Kelvin Gonzales, Alberto Fiallo, Wendy Espinal, Tania Caceres, Josué Arbaje y Luis Joel Croussett.
 Josue Arbaje, National Leader, Delegacion Dominicana 2005, ante su Alteza Imperial el Principe Heredero Naruhito.
Josué Arbaje, Nacional Leader, Delegacion Dominicana 2005.
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El International Youth Development Exchange Program, ha sido sin lugar a dudas la experiencia más enriquecedora de toda nuestra vida porque nos permitió conocer el sistema de vida japonés, la disciplina con la que conviven y sobre todo el equilibrio entre la modernidad y el cuidado de la naturaleza.
Visitar el Japón marcó una transformación en nuestras vidas ya que a través de este programa se promulga la interacción personal entre los participantes, al mismo tiempo que se propicia nuestra participación en las discusiones, y eso nos ayuda a tener una visión más global de nuestro mundo.
El participar en este programa de intercambio juvenil nos ha cambiado la manera de apreciar el mundo, a través de la interacción personal con culturas muy diferentes a la nuestra y por medio de esto fomentar una gran amistad con todos los participantes, la cual mantenemos en la actualidad a través de las tecnologías de la información.
En lo cultural, convivimos como si fuéramos japoneses, nos alimentamos como tal, y lo más importante de todo, vivimos por varios días en casas de japoneses experimentando la cotidianidad familiar, en este sentido podemos afirmar que tenemos en Japón un anexo de nuestras familias dominicanas. Por lo que agradecemos al Gobierno del Japón la oportunidad que nos brindaron y le incitamos a continuar este programa en el futuro, para que esta experiencia llegue a mas dominicanos y dominicanas.
Josué Arbaje
Nacional Leader
Dominican Republic Delegation 2005
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